Guión de armado de lámpara Jesús Alarcón

Guion de instrucciones para cambiar un apagador.

Secuencia 1. Int. Noche. Cuarto de Pedro.
Se escucha la canción Déjame Entrar de Maná.

Aparece un joven de aproximadamente 13 años, Pedro. Va a su escritorio y se sienta. Mira hacia la ventana y se da cuenta de que está oscuro.
Pedro (desesperado): Ya es de noche y yo tengo que estudiar para mi examen de matemáticas de mañana.
Se sienta con rapidez. Mira su lámpara y se dispone a prenderla. El apagador está en el piso, del lado izquierdo del escritorio. A la hora de agacharse para prenderla, se pega en la cabeza con la esquina del mueble. (Se escucha un golpe escandaloso)

Pedro (gritando): ¡Ay ca… Nallas! Ya me pegué otra vez en la cabeza. Tengo que acercar este pin…toresco apagador. Pero ¿Cómo lo hago?

Pedro (relajándose) frota la lámpara. Alabándola: Qué bonita lámpara me regaló mi papá. Lástima que tenga un interruptor tan difícil de activar. No quiero llamar a un electricista porque no tengo dinero para pagarle y dicen que son re pen…sativos y se tardan mucho. Y menos compraré otra lámpara. ¡Esta está re bien!
¿Qué podré hacer? Tengo el examen mañana y no quiero irme a extra.

De pronto, se proyecta una sombra atrás de Pedro y una voz grave dice:
Genio (dudoso): ¿Y este chamaco qué onda? Ay ay ay, vaya dueño que me tocó. En fin.

Genio (entusiasta) Hola. Ya escuché lo que necesitas. Hay que cambiar esta cosa de lugar y tú no sabes… ¿Quieres aprender cómo hacerlo?
Pedro: ¿Qué? ¿Quién? Eemmhh… ¿Yo? ¡Siii!
Genio: Pues… ¡Manos a la obra!

Secuencia 2. Int. Noche. Cuarto de Pedro.

Se escucha la canción “Nunca Digas Nunca” de Bengala. La sombra se proyecta al lado de Pedro y ordena con voz firme:

¡Saca una hoja de papel de tu cajón!:

Pedro: ¿Qué dices?
Genio: Que saques un papel para apuntar lo que necesitas.
Pedro (sacando una hoja de su cajón): Bien, ya la tengo. ¿Y mi pluma? A ver, está en la mochila.
Pedro corre a su cama, en donde está su mochila. Saca una pluma y grita: ¡Listo!
Genio: Pues pare oreja y apunte: Busque una cinta de aislar, pinzas para cortar cables, un desarmador, un pelador de cables y Un Cutter. Todo eso lo tienen tus papás.

Pedro Sale corriendo de su habitación y se muestra una vista panorámica del cuarto, mientras de fondo se escuchan sonidos de alguien moviendo cajas, removiendo utensilios, algo que cae al piso con estruendo y puertas que se cierran y abren. Esto durante 15 segundos.  Finalmente se oyen los pasos apresurados de Pedro al regresar.
Pedro, jadeando, coloca las herramientas sobre la mesa y ahora la sombra se proyecta a su lado izquierdo:

Muy bien, ahora tendrás que comenzar por el paso más obvio.
Pedro (pensativo): ¿Desarmo el apagador?
Genio: ¡No! ¡Desconecta la lámpara, animal!, no creo que quieras que te den toques.

La sombra desaparece y Pedro mira a todos lados, furioso. Cuando su mirada se posa en la lámpara, lleva su mano hacia el enchufe y desconecta el cable.

Pedro: (lamentándose) Bueno, ya qué.

Pedro (casi gritando): Bueno ¿Y ahora?

Desde el techo se ve una luz tenue.
Genio: Ahora sí, mi chavo. Ya puedes desarmar el interruptor. ¡No vayas a perder los tornillos!

Pedro (para sí mismo): Ay este maldito genio, está peor que el profe de física)

Pedro Desarma el interruptor, poniendo cuidadosamente los tornillos al lado derecho de la lámpara. Después retira el apagador.

Pedro: Bueno, ya está desarmado. Luego hay que… que… No estoy seguro. ¿Y si junto los cables?
Se escucha el sonido de una cerveza destapándose.
Genio: Efectivamente. Junta los cables como el profesor Carlos te enseñó. Mientras yo me echo una chela y chance enchufo… la lámpara. ¡Saluuuud!
Pedro: ¡No Manches! ¡No quiero recibir descargas!
Genio: Pues ya no bajes música.

Pedro (gritando): ¡Genio del carajo! ¡Descargas eléctricas! ¡Eso quise decir!

Secuencia 3.
Int. Noche. Sala de Pedro.

Aparece Pedro sentado en el suelo con unos cuadernos.
Pedro: Bueno, ya revisé todo, pero no entiendo bien cómo era eso de juntar cables. La clase era bien aburrida.
Se enfoca la cabeza de Pedro, mientras se escuchan chispas por dos segundos.
Pedro: ¡Ya sé! Voy a hablarle al Neto. Él seguro sabe.

Pedro saca su celular de la bolsa del pantalón y marca.

Se escuchan los tonos del teléfono y el sonido de que contestan la llamada.

Neto: ¿Bueno?
Pedro: ¡Hola, Neto! Oye, necesito de tu ayuda.

Neto: ¿Qué necesita el consentido de la directora?
Pedro: No seas payaso. Es que necesito pelar cables y no me acuerdo cómo.

Neto: Recuerda cómo lo pelaste en el laboratorio.

Pedro: Güey, ¿ya vas a empezar con los albures?
Neto (riéndose) ¡Menso! Que recuerdes cómo pelaste el cable para cambiar el foco en la práctica. Utilizando bien el pelador, que supongo que ya lo tienes.

Pedro (después de pensar unos segundos) ¡Ah sí! Ya me acordé. Vale mi estimado, ¡Muchas gracias!
Neto: De nada. (Cuelga).
Pedro camina apresuradamente a su escritorio y realiza el trabajo lentamente.

Pedro: Creo que ya falta poco; pero ¿Qué más tengo que hacer?

Secuencia 4.
Int. Noche. Cuarto de Pedro.

Aparece Pedro en su escritorio con las manos en la cabeza.
Se proyecta una luz que ilumina la puerta del cuarto y un sonido de restaurant lleno.
Genio (gritando: ¡Otro tequilita doble, por favor!
Pedro (gritando) ¡Oye tú, borracho! ¡Ayúdame!
Genio: Ay hijo de su… Ya se me había olvidado que había chamba. (Con tono de orden) Separa los cables en donde vayas a poner el apagador. ¡Ah! Hazlo con el Cutter.

Pedro separa los cables con cuidado.

Pedro: ¡Listo!
Genio: Pues ahora, tienes que cortar y pelar el cable que va adentro del interruptor.
Pedro corta y pela el cable como ya había aprendido.

Pedro: Ya. ¿Y luego?

Genio: conecta el cable al interruptor. Luego lo tapas.
Pedro sigue las instrucciones minuciosamente. Al último conecta la lámpara y prende.

Pedro: ¡Venga! Ya tengo mi lámpara lista. Ya no habrá necesidad de agacharse para prenderla y claro, ya no me romperé el cr´´aneo.

Genio: Muy bien, chamaco. Ahora trata de no sacar tantas chispas al resolver las operaciones del examen. ¡Yo me voy!

Fin.